Un cineasta amigo de ambas, Diego Osorno, dice de ella que es “una creadora de mucho calado”. Tiene razón. Desde la primera vez que yo vi algo de su obra, quise conocerla, entender qué pasa por la cabeza y la vivencia de una persona que cuenta las historias de élite de ese modo. Con sentido gremial y óptica individualista, con puntadas y profundidad. Con crítica y rigor.
Su narrativa es la de una mujer que ha vivido y sobrevivido; en su caso: la muerte de su madre cuando era niña, una educación provinciana y un papá que sacó la casta. Se le nota esa sensación de saberse de un lugar, reconocerse de una manera y, a la vez, sentir que se pertenece a un mundo raro.
El suyo es un crédito indispensable en la industria cinematográfica actual. Hace un cine inteligente, agudo y cuidadoso; femenino con F de Fuerte.
Un cineasta amigo de ambas, Diego Osorno, dice de ella que es “una creadora de mucho calado”. Tiene razón. Desde la primera vez que yo vi algo de su obra, quise conocerla, entender qué pasa por la cabeza y la vivencia de una persona que cuenta las historias de élite de ese modo. Con sentido gremial y óptica individualista, con puntadas y profundidad. Con crítica y rigor.